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Hola a todos, queridas amigas, queridos amigos, queridas familias. Hoy os quiero hablar de otro descubrimiento materno. También os hablaré de moda, concretamente las tendencias en ropa infantil para este invierno 2018/19. Y cómo no, traigo más trucos y consejos preocupones, para mantener a salvo a nuestros retoños.
Descubrimientos Maternos
Algo curioso, pero muy muy curioso y ‘rigurosísimente’ comprobado -mediante el empirismo- es, que cada vez que veo ropita, se me cae la baba al tiempo que suspiro, cual damisela en apuros.
Así, que no dejo de hacer descubrimientos maternos en este campo, el de la moda infantil.
Porque el ‘juguetístico’ no da más de sí, es de piñón fijo, carritos y/o sillitas para hacer trompos con las muñecas, o coches, de cualquier tipo.
CONSEJOS CON LA ROPA INFANTIL EN INVIERNO
Me gusta la moda
Antes que nada, tengo que confesar que estoy absolutamente fascinada con la moda infantil y sus mil y un estilismos.
Porque -seamos sinceras- quién no disfruta comprando ‘modeluquis’ a los chiquitines de la casa. Es increíble el poder de atracción que tiene esa ropita. Ya no para nosotras -madres neuróticas, que queremos llevar a nuestros vástagos hechos un pincel, sin dejarnos la nómina– También en abuelas, tías, madrinas…
Me encanta la ropa en general y la infantil en particular. En todas sus versiones… ¡¡Ayyy, qué rebonica es!! Me da igual un zapatito, un calcetín, que un vestido… ¡¡Por favooor, qué cucada!!*
*Después de este momento de ‘semienagenación’ materna, prosigo.
Pero claro, que me encante todo lo que veo, no hace viable su adquisición. Ya sea por precio privativo, por no saber para qué ocasión se lo podría poner… Porque Tiranito no tiene a bien mostrarse voluntariosos y cooperativo, o por las interminables colas*. El caso es que vamos delegando el estilismo de nuestros peques en abuelos, tíos…
Y nosotras -madres neuróticas a las que no nos da de sí la vida- exceptuando algún caprichito (porque qué sería de nosotras, oh, preocuponas mías, sin un capricho), nos centramos en la ropa de batalla. Prendas de una versatilidad inusitada.
*Ya he tenido ocasión de quejarme de lo mucho, muchísimo que odio ir de tiendas. Y lo mucho, muchísimo que me gusta ahorrar.
Me gusta ahorrar
En mi caso, no quiero gastarme un dineral -que no me sobra- en ropa «de una puesta». Ya escarmentada por años anteriores, en los que terminaba en las bolsas de la guarde, ropita ‘monitisísima’, con su etiqueta y todo.
He echado el freno consumista
Por eso mismo, os voy a dar unos «sabios consejos» sobre cómo vestir a vuestros hijos, como ya hicieron antes que yo, chorrocientas madres, y seguirán haciendo nuestras hijas.
Dicha esta gilipollez, quiero compartir con vosotras –o seguidoras de esta humilde, pero talentosa bloguera- otro de mis…
Grandes hallazgos maternos
Se trata de la vecina con un niño un año mayor que el tuyo, tiene de todo, oiga
Ropita para cualquier ocasión desde bebés a la talla que necesites, porque su hijo será siempre un año (y, probablemente, una talla) mayor que el tuyo.
Como os decía, en casa de la vecina, podéis encontrar prendas para todas las temporadas del año. Conjuntos, sudaderas, monos, shorts, polos, chalecos, bodys, blusas, chaquetas, peleles… Bañadores, ropa «de bonito» para bautizos, comuniones… ¡Hasta uniformes! (si tienes la suerte de que coincida la guarde).
Yo tengo un gozo en al Alma, grande!!
Y ya que estamos hablando de ropa…
¿Qué serán tendencia este invierno 2018/19?
Pues como en todo lo referente a expertos -la moda no iba a ser diferente- hay discrepancias.
Pero lo que sí es fiable es:
¿Qué se ve en la calle?
Y aquí vemos de todo, dependiendo, claro está, del ambiente que frecuentemos.
No veremos los mismos looks en la cola del súper, que en la cena de empresa (o sí, si es a mí a quien ves. Porque a una le fastidia en demasía, gastarse un pastizal en un vestido para una ocasión).
- Colores, muchos colores, tanto en niños como en niñas y casi de cualquier edad. Porque ¿hay mejor etapa para lucir colorines que la infancia? Ya te lo digo yo, no. A no ser que trabajes en el circo, o estés de veraneo, entonces sí. Ahí se permite todo.
- Diseños psicodélicos, formas abstractas, con brillos, luces, fluorescentes, metalizados y demás combinaciones estrambóticas, que mi cerebro se ve incapaz de procesar, pero embelesan a mi Tiranito.
- Me he fijado que se sigue viendo el rollo militar de otros años, a mí me encanta. Si bien, esto ya es para semiadolescentes en adelante. Queda gracioso en pequeños.
- También se ve mucho estilo marinero en jerseys y algunos detalles en mochilas, abrigos…
- Y los clásicos, en tejidos naturales, colores neutros, beige, rosa palo, verde…
Abriga a tu hijos sin sobre abrigarlos
Te pongo en situación:
Día laborable, suena el despertador, lo apago, no sin antes mirar el tiempo. Porque, reconozcámoslo, a esas horas da pereza incluso asomarse a la ventana.
Se acerca el invierno, y no son los caminantes blancos los que vienen, no. Son los bichitos que llenan las narices de nuestros vástagos de mocos.
Un invierno que se desvanece entre noches en vela, toses, y contagios, que no podemos permitirnos, pero que igualmente llegan y nos dejan una semana para el arrastre….
Es por ese miedo -puede que, infundadamente catrastrofista-, que ‘chorrocientos’ millones de madres y padres, no dudamos en abrigar a nuestros pequeños, como si fueran a acampar a Siberia. Craso error, oh, preocupona mía.
Sobre abrigarlos es contraproducente
Hay evidencias de que las bajas temperaturas «agarrotan» los cilios (una especie de pelillos muy finos que recubre nuestro sistema respiratorio). Resumiendo, son los que -en condiciones óptimas de temperatura- frenan y expulsan a esos bichitos. Dejando campo abierto para infecciones respiratorias de las vías altas y bajas, cuando el aire es frío.
Mitos y realidades:
- Abrigarles en exceso es tan malo?
- ¿Qué es mejor, gorro, bufanda o guantes?
- ¿Y las orejeras, evitan las otitis?
- ¿Es verdad que los catarros entran por los pies?
- ¿Los niños son más sensibles a los cambios de temperatura?
Abrigarles en demasía no es bueno, ni malísimo, es incómodo. Tu peque no se podrá podrá mover con libertad, sudará…
Y sí, es posible que un cambio brusco de temperatura (al salir al exterior, encebollado y mojado) ayude a pescar un catarro o un mareo, por calor.
Pero más allá de eso, no es mortal. Son más frecuentes los golpes de calor en sitios cerrados, que la hipotermia en campo abierto. Como dato.
Bueno, pues si bien es cierto, que cabeza, manos y pies, son fundamentales para mantener el calor. También hay otras partes susceptibles de enfriarse.
Como pueden ser orejas, garganta, lumbares… Con las rachas fuertes de viento, oído, garganta y nariz, sufren. Por ello el consejo que siempre se da es:
Gorro que tape las orejas y bufanda hasta la nariz.
Si es una zona muy fría, un pasamontañas, te soluciona media papeleta, al templar el aire que respiramos, niños y padres.
Porque, tanto niños como adultos, somos seres humanos, y nos regimos por las mismas leyes. Así que si tú no vas como un esquimal, no vistas a tu vástago como si fuera el muñeco de michelín, hombre, por favor, que no se puede ni mover el pobre.
Los recién nacidos son una excepción.
Los menores de un mes, aún no regulan bien la temperatura, y pueden sufrir un cuadro de hipotermia. Con esto me refiero a que, si tu peque tiene más de un año, le deberías abrigar, como te abrigas tú.
Y ten en cuenta:
Que -por ejemplo, en el parque- él no para, seguramente pasará más calor que tú, si permaneces sentada o de charleta, sin trepar, ni correr. (De vez en cuando, a todas nos toca echar una carrerita detrás suya, pero no es lo mismo).
Y no lo digo yo -según los expertos- los menores de tres meses, se enfrían antes porque su sistema de termorregulación aún es inmaduro, y el porcentaje de agua corporal es mayor. Aquí los expertos recomiendan, poner una o dos prendas más de las que usaremos los adultos.
Así que el consejo es:
Sentido común
No hagas tuya la frase «Le pongo una rebequita a la niña, que tengo frío»
En invierno, 20° a 22° C es la temperatura óptima para tu hogar, en todas las habitaciones, así que abrigar en exceso al pequeño le resultará incómodo. Lo recomendable es un pijama.
Mejor por capas
A ver, si esto funciona con el enrutamiento encriptado, ¿no va a funcionar con tu peque?
Si sabemos -con exactitud- el destino principal de nuestro retoño.
Que, por ejemplo: Va a ir andando a un cumpleaños, para después entrar en un parque de bolas… Lo sensato, sería ponerle un buen abrigo y algo ligero debajo.
Pero no siempre sabemos -con certeza- dónde nos llevará el destino. Y aquí lo mejor, sin duda, son las capas.
Viste a tu peque como si fuera una cebolla
El método cebolla, crea un microclima entre capa y capa, que tiene un factor aislante. Y, por si fuera poco, también favorece la «climatización asistida paterna». Suena sofisticado que te cagas, pero no es otra cosa, que ir retirando capas de ropa al crío, en función de la temperatura.
Y ya me voy a ir despidiendo, que me lío a hablar… Y os aburro. No sin antes, preguntarte, ¿y tú, cómo vistes a tu peque?

Se acerca mi tercer aniversario como madre -o lo que es lo mismo- el tercer cumpleaños de Tiranito. Y es que, sin habernos recuperado de la Navidad aún, vuelve la ilusión, los juguetes, las sorpresas, los regalos, revivir tus propios cumpleaños. Y es que, aunque me queje infinito de la maternidad, tiene algo de mágico.

QUÉ REAGLO A UN NIÑO SEGÚN SU EDAD
Los que me conocéis, ya sabés cuán neurótica y preocupona soy. A los que no, ya os lo digo yo. Lo soy, y además impaciente. Esta vez, han sido las Navidades, que una es muy previsora y (como el año pasado, para que no me pille el toro), mi apremio por equiparme con los mejores juguetes para Tiranito, ha sido legendario.
Mi hijo se ha hecho YOUTUBER y es un agotamiento se hace llamar Pablo Matamiento

- No escribo cosas tan interesantes como para invadir tu correo cada vez que publico cualquier mierda
- Pero sí, te animo a guardarme en favoritos por si algún día te apetece regresar
Felices fiestas y seguiré tus sabios consejos de moda invernal
Felices Fiestas y necesito fotos de tu estilismo infantil ><
¡Hola! Das muy buenos consejos, y estos no se deben tomar a la ligera. Coincido en que a todos nos gusta ahorrar jajaja ¡pero no por ello arriesgarnos a enfermar o, en este caso, hacer enfermar a nuestros hijos! Por mi parte, no tengo mucho que decir ya que no tengo hijos.
Lo dicho, que me encanta tu blog, además por el factor de presencia que se nota que te lo curras mucho.
¡Felices fiestas y un abrazo enorme!
Oh!
Muchísimas gracias, Esther!!
Un abrazo enorme!!
En casa hacemos lo mismo, nos fijamos en lo que llevan los críos del cole y por la calle… y es imitamos.
Hombre, lo mismo…. Jajajajaja
Felices fiestas!
Yo reconozco que cuando el peque era bebé tendía a abrigarle en exceso, creo. Era muy exagerada! Pero también te digo que tengo la suerte de que pocas veces se me ha puesto malito 😉 Ya ni te cuento el mal que me daba con el tema «Cómo evitar que se destape por la noche en su cama» jejeje
El mío es una estufa, de hecho le llamo Estufito, a veces. Desprende una cantidad de calor… Algo inusitado, en serio, se empañan los cristales y todo. Jajajajaja. Así que he desistido, ya no le arropo.
Yo lo cierto es que tiendo a sobreabrigar a mis criaturas. Menos mal que tienen a su padre, cuyo termostato interno no está averiado como el mío y pone un poco de cordura en el asunto 😂😂.
Yo lo cierto es que tiendo a sobreabrigar a mis criaturas. Menos mal que tienen a su padre, cuyo termostato interno no está averiado como el mío y pone un poco de cordura en el asunto 😂😂.
Mens sana in corpore con termostatun tirando a regulinchis